31 oct 2013

Mariela García Vega



San Luis Río Colorado, Sonora.- Agentes de la Policía Estatal Investigadora (PEI) detuvieron a una joven, de 19 años de edad, como probable responsable de las lesiones que le causaron la muerte a su hija de tan solo dos meses de edad, en hechos ocurridos la madrugada de hoy en la colonia Federal, en esta ciudad. La detenida responde al nombre de Mariela García Vega, quien se encuentra confesa de los hechos. Los agentes también detuvieron a la pareja sentimental de Mariela y a la madre de esta. La bebé que perdió la vida fue identificada como de Erika Britaní Yáñez García, de dos meses de edad. 

 En un comunicado, la Procuraduría General de Justicia de Sonora (PGJE) informó que los hechos ocurrieron alrededor de las 09:05 horas de este miércoles, cuando los elementos de la Policía Estatal Investigadora tuvieron conocimiento de que en un domicilio ubicado en la citada colonia se encontraba una bebé sin vida. Al acudir al lugar corroboraron los hechos y dieron aviso al Agente del Ministerio Público, quien ordenó el levantamiento y traslado del cuerpo para realizar la autopsia de ley, en la cual se estableció que la causa del deceso fue traumatismo craneoencefálico, además de presentar un cuadro de desnutrición severo. 

 Elementos de la PEI iniciaron con las indagatorias correspondientes y presentaron ante el Agente del Ministerio Público del Fuero Común a la madre de la bebé, Mariela García Vega, así como al padrastro Jesús Galván Gutiérrez, y a la abuela de la bebé, quienes viven en el domicilio donde ocurrieron los hechos. En su declaración ministerial, la madre de la bebé manifestó que alrededor de las cuatro de la mañana, antes de irse a trabajar, la niña estaba llorando, por lo que la cargó, pero como no paraba de llorar la aventó al colchón donde duermen. Posteriormente se fue a trabajar, dejándola en el colchón junto al padrastro. Cuando el padrastro se despertó, alrededor de las ocho de la mañana, vio a la niña tirada en la cama y se dio cuenta que no respondía por lo que llamó a la madre de la detenida para que la revisara, minutos después llamaron a una ambulancia, cuyos socorristas al llegar determinaron que la bebe no tenía signos vitales El Agente del Ministerio Público consignará en las próximas horas a Mariela García Vega, como probable responsable del delito de homicidio calificado y lo que resulte; mientras que la situación jurídica de las otras dos personas que fueron presentadas se definirá dentro del término que marca la ley. Fuente: Lapoliciaca.com

26 oct 2013

Soledad Esparza Flores

Una obrera de una fábrica de calzado, de 27 años de edad, asesinó a sus dos hijos en la comunidad de San José de Malpaso, de este municipio. Los ahogó y después quemó sus cuerpos. Los hermanitos eran una niña de 10 años y un niño de siete. Los cuerpos de los pequeños fueron encontrados en la orilla de una presa, cerca del bulevar Aristóteles, ambos se encontraban calcinados en medio de un círculo trazado de tierra. Hasta el momento no se ha dado a conocer si se trató de un ritual o si simplemente la filicida delimitó el lugar. De acuerdo con el primer reporte de las autoridades, fue desde el pasado domingo cuando Esperanza Esparza Flores ahogó a los niños Dana Camila, de 10 años de edad, y Armando de 7 años, en la presa y dejó los cuerpos en la orilla. 

Al día siguiente la desnaturalizada madre regresó para quemarlos, pero fue hasta la mañana de hoy que la mujer le contó a su pareja sentimental lo que había hecho. Según las autoridades, la mujer confesó a su pareja sentimental el crimen debido a que había hablado con un sacerdote y le dijo que tenía la intención de entregarse, luego el hombre se dirigió al sitio que la mujer le indicó y ahí descubrió los cuerpos, por lo que alrededor de las 10:40 de la mañana dio aviso a la Central de Emergencias 066 de Lagos de Moreno, que a su vez, notificó el hecho a la Policía de León. Cuando llegó la Policía a la casa de ambos, Esperanza intentó escapar, pero fue sujetada por su pareja, acusándola de haber cometido los crímenes, sin embargo, él también fue detenido. 

Cuando los policías quisieron subir a ambos en la misma patrulla, el hombre trató de correr y alejarse de ella. "¡No me quiero ir! ¿Cómo puede haber gente enferma en el mundo?", gritó llorando y pidió ser llevado en otra patrulla. Luego de que la mujer describiera el lugar, los municipales se dirigieron al sitio; el camino donde fueron hallados los pequeños es muy accidentado, lleno de arbustos de espinas y de terracería; luego de confirmar el hecho la zona fue asegurada; pero lo sorprendente fue la respuesta que recibieron los agentes cuando le preguntaron a la mujer por qué los había matado y respondió: 

"Alguien tenía que morir". De acuerdo a las autoridades, los niños debieron haber sido entregados a la Casa Hogar Loyola el domingo pasado, pero la mujer no los llevó. La mujer se justificó diciendo que ya vivía en Guadalajara con su pareja sentimental y se los llevaría a vivir ahí. También mencionaron que existían antecedentes de violencia intrafamiliar, lo que podría haber derivado en la situación por la cual los niños vivían en la casa hogar. 

Tanto Esperanza como su pareja fueron entregados por elementos de la Policía Municipal a las autoridades ministeriales en calidad de presentados para determinar la participación de cada uno en la muerte de los niños. Las autoridades ya realizan el peritaje correspondiente para deslindar responsabilidades.